Por: Juan Daniel Correa Salazar
@juandanielcorrea
@musica_creativa_de_colombia
7 de Mayo de 2020
Si entre todas hay una canción que a un colombiano le produzca nostalgia esa es “Mi pueblo natal” del Grupo Niche:
A lo lejos se ve mi pueblo natal
No veo la santa hora de estar allá
Se vienen a mi mente bellos recuerdos
Infancia alegre que yo nunca olvidaré
Luces de esperma que al fondo se divisan
Titilantes igual que estrellas en el cielo…
…Ya vamos llegando, me estoy acercando
No puedo evitar que los ojos se me agüen…
Imposible, evitarlo. Se aguan porque se aguan. Siempre será un anhelo llegar. Con más veras aún en estos tiempos demenciales. ¡Carajo!, ¿hasta cuándo estaremos lejos? Queremos, más que nada, regresar a los días cotidianos, a comprar el pan sin andar enmascarados, a tomarnos un jugo de naranja recién exprimido en cualquier esquina. A deambular por ahí.
Menos mal, en medio de la desilusión y el desencanto, aparecen guías, maestros, que iluminan el camino. Uno de ellos es nuestro gran pez, Juancho Valencia quien dirigió esta versión del himno de la melancolía:
¡Qué combo de artistas los que se montaron en su bus! Continuamos, para adelante en el tiempo. No hay reversa. La música es el motor; nos mantiene vivos. Alumbra los días. Nos recuerda que podemos seguir soñando.
Es el antídoto y el remedio para demasiados males. Esta humanidad está enferma; es real. Lo bueno es que también tenemos al alcance La Cura:
¡Qué clásico! Duro, ¿cómo no? Ya la embarramos, nada que hacer; eso sí, ni se nos pase por la cabeza ponernos a llorar como “niñas”:
I would say I'm sorry
If I thought that it would change your mind
But I know that this time
I've said too much, been too unkind
I tried to laugh about it
Cover it all up with lies
I tried to laugh about it
Hiding the tears in my eyes
'Cause boys don't cry
Boys don't cry!
Triste historia, que se repite y se repite. Nada sacamos con arrepentirnos. Linda historia, que se repite y se repite. La obra completa de The Cure nos hace estar orgullosos de ser humanos.
Digan lo que digan, yo no aguanto ni un segundo más: ¡Lloraré a mares!
*Este texto es una lágrima musical.
Denle "Play" a la Playlist del Gomelo Champetúo:
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